El tiempo se acaba. La igualdad de género sigue siendo el mayor reto en materia de derechos humanos. Invertir en políticas para avanzar hacia la igualdad de género es un imperativo desde la perspectiva de derechos humanos y la piedra angular para crear sociedades inclusivas. Los avances para las mujeres benefician a todas las personas en todo el mundo. 

Violencia de género

La erradicación de la violencia contra las mujeres y las niñas requiere de esfuerzos continuos, sostenidos y urgentes. ONU Mujeres acompaña a las instituciones y al Estado Mexicano para generar políticas y acciones claras, en alianza con organizaciones de la sociedad civil y del movimiento de mujeres.

¿Qué es el feminicidio?

El feminicidio es el asesinato intencional de una mujer por el hecho de serlo. El feminicidio es la máxima expresión de violencia de género contra las mujeres y niñas y es el desenlace de un proceso de abusos, amenazas e intimidación constantes en el hogar, violencia sexual o situaciones en las que las mujeres se encuentran en una situación de inferioridad en términos de poder o disponibilidad de recursos. 

En la mayoría de los casos, quienes cometen los feminicidios son parejas, exparejas, familiares o personas cercanas a las víctimas.  

Los motivos que llevan a los agresores a hacerlo están relacionados a las creencias culturales y sociales de lo que hemos aprendido para ser hombres y mujeres. Estas creencias (estereotipos, roles y mandatos de género) se convierten en expectativas que generalmente ponen en desventaja y en una situación de vulnerabilidad a las mujeres (así como a la comunidad LGBTI+ y otros grupos en condición de vulnerabilidad)  frente a los hombres, quienes generalmente viven una situación histórica de poder.  

El feminicidio es la máxima expresión de violencia de género contra las mujeres y niñas, y es el desenlace de una historia de violencia previa en las relaciones de confianza, de pareja o familiares: psicológica, económica, patrimonial, sexual, física.  

En algunos casos, los agresores son desconocidos sin antecedentes de violencia previa, pero que las razones que los motivan están relacionadas a su condición de ser hombre, respecto a la condición de ser mujer.  

¿Se pueden prevenir los feminicidios? 

Un feminicidio, como cualquier delito, puede prevenirse. Al ser la máxima expresión de violencia de género contra mujeres y niñas, existen muchas conductas violentas que podemos identificar a tiempo, las estrategias de prevención deben ser integrales y atendiendo a las causas más relacionadas.  

Una de las principales conductas que se deben eliminar es el machismo, el cual se aprende y transmite de generación en generación de manera social y cultural. El machismo se refiere a colocar énfasis, exageración, admiración, valoración positiva y aprobación de las características masculinas y la creencia en la superioridad del hombre. No es necesariamente explícito, se observa en las dinámicas de trato y, por lo tanto, hombres y mujeres pueden tener conductas o actitudes machistas, aunque socialmente las vemos más en los hombres. 

Ejemplos de creencias/conductas/actitudes machistas:  

  1. Las personas usan la violencia para resolver conflictos u obtener lo que desean
  2. la creencia de que las mujeres son propiedad u objetos sexuales para satisfacer a los hombres 
  3. colocar el valor de las mujeres y su rol en lo doméstico (en la casa) y en los cuidados de hijas/hijos o familiares, al servicio de los hombres 
  4. exacerbación de la virilidad y/o masculinidad miedo o rechazo a que les llamen homosexuales 
  5. creencia de que la heterosexualidad es lo “normal” 
  6. la creencia de que las mujeres son enemigas “naturales” 
  7. el rechazo y desprecio a lo que se considera femenino, sobre todo si se observa en hombres 
  8. la creencia de que la infidelidad es “normal” en los hombres y algo inaceptable en las mujeres 

Todas las personas en todos los ámbitos pueden contribuir a la prevención

Cualquier muerte violenta de una mujer o niña debe investigarse y suponer que se trata de un feminicidio

  • Dada la evidencia contundente sobre la frecuencia y las razones por las que los hombres asesinan a mujeres, la SCJN ha establecido que todas las muertes violentas de mujeres y niñas deben investigarse y considerar como línea principal de investigación, que se trata de un feminicidio.  
  • Sin embargo, puede haber casos en los que no sea así, ya que para establecer que es un feminicidio, no basta con conocer el sexo de la víctima, sino que es preciso investigar y esclarecer lo ocurrido, tomando en cuenta la motivación de la persona agresora y el contexto social, familiar y cultural del crimen. 
  • Por ejemplo, si después de una investigación se llega a la conclusión de que una mujer iba a la tienda y muere al ser atropellada por un hombre, podemos decir que no fue un feminicidio, pues la motivación de tal acción no conlleva razones de género.

¿Cuáles son los supuestos para que se configure un feminicidio según la Ley vigente? 

Cuando nos referimos a un feminicidio, la ley se refiere a un delito, en el que se priva de la vida a una mujer por razones de género, lo que puede identificarse que ocurre cuando coinciden dos o más de las siguientes circunstancias: 

  1. Cuando la víctima presente signos de violencia sexual de cualquier tipo; 
  2. Cuando a la víctima se le hayan infligido lesiones o mutilaciones degradantes, previas o posteriores a la privación de la vida o actos de necrofilia; 
  3. Cuando existan antecedentes o datos de cualquier tipo de violencia en el ámbito familiar, laboral o escolar, del agresor en contra de la víctima; 
  4. Cuando haya existido una relación sentimental, afectiva o de confianza entre el agresor y la víctima; 
  5. Cuando existan datos que establezcan que hubo amenazas relacionadas con el asesinato, acoso o lesiones del agresor en contra de la víctima; 
  6. Cuando la víctima haya sido incomunicada, en el tiempo previo al feminicidio; 
  7. Cuando el cuerpo de la víctima sea expuesto o exhibido en un lugar público. 

Fuente: Elaboración propia con base en el artículo 325 del Código Penal Federal. Disponible aquí: https://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/CPF.pdf

¿A qué se refiere “en razón de género” o “por el hecho de ser mujer”, cuando hablamos de feminicidio? 

Las frases “en razón de género” o “por el hecho de ser mujer” nos ayudan a describir e identificar las creencias y comportamientos que como sociedad esperamos de las mujeres; las razones de género también afectan a los hombres que son parte de la comunidad LGBTI+). El hecho de “no cumplir” con las expectativas y mandatos que la sociedad tiene de las mujeres y las niñas (estereotipos, mandatos y roles de género) ha recrudecido la violencia feminicida, de los hombres que mantienen esta visión machista del mundo. 

Muchos de los hombres que cometen un feminicidio tenían una relación de confianza o de cercanía con la mujer víctima (generalmente pareja, expareja o familiar), en donde ejercía violencia previa aprovechando su situación de poder (tener mayor edad, mejor estatus social y económico, tener un mejor salario o ser el único ingreso del hogar, manipular, ofender y aislar para que la mujer no se defienda, amenazarla a ella o a sus hijas e hijos en caso de que denuncie, etc).

También observamos que, al cometer el feminicidio, los agresores tratan a las mujeres y sus cuerpos de forma humillante evidenciando su odio; se puede encontrar violencia sexual, tortura, marcas o lesiones en partes sexualizadas del cuerpo (senos, vulva, vagina, nalgas), finalmente se deshacen de sus cuerpos, frecuentemente sin ropa, en un lugar público de difícil acceso; en los peores casos, los cuerpos son desmembrados, arrojados o desaparecidos.  

Entre los motivos “por razón de género” que mencionan los hombres que cometieron un feminicidio (e incluso que la sociedad utiliza para explicar un feminicidio) se encuentran:  

  • Porque era mía 
  • Porque me engañó  
  • Porque me dejó  
  • Por celos  
  • Porque no me hace caso en lo que le ordene, se me reveló 
  • Porque estaba “indefensa y sola” 
  • Porque vestía de forma “provocativa” 
  • Porque andaba sola en la calle y en la madrugada 
  • Porque estaba borracha/drogada  
  • Porque era mala madre y esposa  
  • Porque era prostituta/trabajadora sexual  
  • Porque la quería demasiado 

En el caso de los homicidios cometidos por hombres hacía otros hombres, vemos que los motivos y razones son diferentes. Es decir, si un hombre va solo por la calle, borracho de madrugada, podrían asaltarlo, golpearlo o incluso asesinarlo porque se defendió, pero es muy baja la probabilidad de que lo agredan sexualmente, le mutilen los genitales o que la persona agresora sea su expareja o pareja actual.  

¿Cuál es la diferencia entre feminicidio y homicidio? 

Todo feminicidio siempre es un homicidio, pero no todo homicidio, es un feminicidio. Estas conductas de privación de la vida de otra persona han sido diferenciadas por las leyes mexicanas debido a las razones que motivan a que hombres maten a mujeres y niñas, por el hecho de serlo. Esta problemática social que afecta a más de la mitad de la población no sucede de manera aislada o al azar, ni de manera “repentina”.

Mujeres y niñas se encuentran en riesgo de salir de casa y no volver, o de morir a manos de hombres conocidos, por eso, por ser mujeres y niñas. Si bien, se ha diferenciado este delito de manera reciente, la violencia hacía mujeres y niñas se observa en la mayoría de las sociedades y desde tiempos muy remotos, la violencia tiene como pilares usos y costumbres, en la sociedad, cultura e historia.   

En el caso de los homicidios cometidos por hombres hacía otros hombres, vemos que los motivos y razones son diferentes. Es decir, si un hombre va solo por la calle, borracho de madrugada, podrían asaltarlo, golpearlo o asesinarlo porque se defendió, pero es muy baja la probabilidad de que lo agredan sexualmente, le mutilen los genitales o que la persona agresora sea su expareja o pareja actual.  

¿Cuáles son las responsabilidades de las autoridades ante un caso de feminicidio? 

Las autoridades tienen la responsabilidad de prevenir, investigar, sancionar y reparar las violaciones a los derechos humanos de las personas. En el caso de la violencia contra las mujeres y la violencia feminicida, todas las autoridades, de todos los poderes y gobiernos deben generar estrategias que aseguren que las mujeres y niñas vivan en este país de manera plena y libres de violencias.  

Prevención: Las autoridades federales, los gobiernos estatales y municipales deben generar estrategias de prevención de la violencia de género contra las mujeres, en conjunto con el sector privado, los medios de comunicación, la sociedad civil organizada, las activistas, las familias, todas las personas pueden contribuir. Algunas estrategias se orientan a la identificación temprana de la violencia en contra de mujeres y niñas para que no siga escalando; otras más, hacia la prevención para que nunca ocurra la violencia y se transformen sus causas sociales, o en caso de que ya haya ocurrido, que no vuelva a suceder.  

Investigación:  Es responsabilidad exclusiva de las Fiscalías en los estados en donde suceden los delitos. En algunos casos cuentan con Fiscalías especializadas de feminicidio, la coordinación de las investigaciones compete a los ministerios públicos con apoyo de la policía de investigación y el equipo forense y criminólogo. Estas instituciones deben investigar y encontrar evidencias científicas, de manera pronta, objetiva y con calidad. En algunos casos, las Fiscalías integran a la sociedad civil y academia en las investigaciones para procesos forenses y peritajes que requieren personal que conozca las dinámicas locales y que esté altamente calificado. 

Sanción: a cargo del Poder Judicial de los estados (personal jurisdiccional-jueces y juezas), quienes se apoyan de las leyes vigentes, y de las evidencias científicas de la investigación de la Fiscalía para: 

  • determinar la responsabilidad de una persona, 
  • emitir una sentencia  
  • emitir medidas de reparación del daño para el acceso de la justicia a las víctimas.  

En todo este proceso las víctimas requieren servicios legales altamente especializados que usualmente son aportados por las Organizaciones de la Sociedad Civil. Cuando una víctima no recibe la sentencia que considera justa se puede recurrir al Poder Judicial Federal e incluso a las Cortes Internacionales, como es el caso de la sentencia de Mariana Lima dictada por la Suprema Corte de Justicia o la Sentencia conocida como “Campo Algodonero” contra el Estado Mexicano por los feminicidios en Ciudad Juárez. 

Reparación del daño: La reparación del daño es muy compleja de lograr, pues hay situaciones y pérdidas que son irreparables. Sin embargo, las autoridades tienen la responsabilidad de sancionar los delitos y violaciones a derechos humanos.  

La reparación puede ir dirigida a víctimas directas (sobrevivientes de violencia feminicida) o víctimas indirectas (familiares de las víctimas, principalmente hijas e hijos, madres, abuelas, hermanas y padres). Unas de las medidas esenciales son la memoria y redignificación de las víctimas y medidas de no repetición, para que esos casos no vuelvan a suceder.   

¿Cómo contribuir a prevenir el feminicidio? 

El feminicidio puede y debe ser prevenido. A pesar de ser generalizada, la violencia contra mujeres y niñas se puede evitar: 

CREER A LAS VÍCTIMAS/SOBREVIVIENTES 

  • Acabar con la violencia contra las mujeres y niñas, comienza por creer a las víctimas y sobrevivientes. 

EMPODERAR 

  • Promover el empoderamiento y liderazgo de las mujeres y niñas, sobre todo en espacios/ámbito público/s 
  • Promover el bienestar de mujeres y niñas, a través del empoderamiento y oportunidades de desarrollo: educación, empleo, salud.  

INFORMAR Y TRANSFORMAR LAS NORMAS SOCIALES  

  • Identificar y compartir qué es la violencia contra las mujeres y niñas, qué tipos y modalidades existen, cómo se manifiesta en las relaciones (de cualquier tipo)  
  • Compartir las historias de éxito que demuestran que la violencia contra las mujeres y las niñas se puede prevenir, mostrando estrategias e intervenciones eficaces para inspirar a que se amplíen las soluciones que dan resultado. 
  • Identificar y eliminar los estereotipos y roles asociados al hecho de ser hombre o mujer (expectativas sociales de lo que creemos deben ser) 
  • Transformar la cultura machista implica que se involucren todas las personas de la sociedad, comenzando por identificar los estereotipos que tenemos de hombres y mujeres para reflexionar cómo afectan nuestro actuar y trato con mujeres y niñas 

TRABAJAR CON OSC 

  • Fortalecer el movimiento de mujeres y feministas que contribuyen a la igualdad y el acceso de las mujeres a una vida libre de violencia.  
  • Se deben generar, por todos los sectores de la sociedad, estrategias dirigidas a la prevención de todas las formas de violencia contra mujeres y niñas, que impacten en las causas del feminicidio: cultura machista, normas implícitas de desigualdad y exclusión hacía ellas 

SERVICIOS ESENCIALES Y APOYO A VÍCTIMAS/SOBREVIVIENTES 

  • Ofrecer apoyo social y psicológico a las mujeres y niñas víctimas de cualquier tipo de violencia y alertar de manera temprana a las autoridades  
  • Contar con servicios esenciales fortalecidos y con presupuesto que permitan actuar desde las primeras señales de violencia, que doten de condiciones a las víctimas para romper el círculo. 
  • Para autoridades: brindar protección a mujeres y niñas que denuncian violencia; ofrecer refugios y planes de seguridad. La violencia suele escalar en gravedad y al vivirse como un “círculo», es muy difícil que las sobrevivientes salgan de ello.  

¿Cómo se puede eliminar el feminicidio? 

La eliminación de violencia contra las mujeres y niñas requiere de estrategias continuas, sostenidas en el tiempo, tanto inmediatas como a mediano y largo plazo: 

  • Atender las causas de la violencia contra mujeres y niñas desde sus raíces, lo que implica generar y fortalecer acciones de prevención en todos los espacios con todas las personas y sectores de la sociedad.  
  • Investigar, enjuiciar y sancionar la violencia feminicida con perspectiva de género y derechos humanos, con base en los protocolos de investigación de feminicidio. 
  • Combatir la impunidad, es decir, se requiere agilizar los procesos de investigación y sentencia, como sabemos muchos de los perpetradores están en el circulo inmediato de la víctima, lo que con buenas investigaciones basadas en evidencia se puede identificar a los responsables. Lo cual debe ir de la mano de una sanción expedita y apropiada al delito. Ello lanzaría un fuerte mensaje a posibles perpetradores de cero tolerancia a la violencia contra mujeres y niñas. 
  • Capacitar, evaluar e incentivar a policías estatales y municipales, líneas de emergencia y unidades de atención, para atender las denuncias con perspectiva de género. 
  • Fortalecer los registros administrativos, estadísticas y análisis de contexto que permitan dimensionar y transformar las causas de la violencia feminicida. 
Redaccion
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